¿Por qué es tan importante la relación de un niño con su can? Son compañero de juegos, siestas y aventuras. Pueden ser amigos inseparables. El can puede enseñarle lo que es compartir y disfrutar del momento. Y lo importante que es cuidar de los demás cuando están enfermos o tienen achaques asociados con la vejez. El ciclo de la vida. Porque, por desgracia, probablemente será su perro quién le revele a ese niño lo que es el dolor de la pérdida, la inevitable pérdida. Además, tal y como explicó el educador canino Santi Vidal en una charla enfocada a este tema, "Lo que le enseñas a un niño sobre cómo tratar a un perro es, en esencia, lo que le enseñas sobre cómo tratar a otras personas: es decir, si le enseñas que hay que respetar el espacio del perro, que hay que tener en cuenta su lenguaje y su forma de ver el mundo es altamente probable que ese niño aplique esas mismas 'reglas' con los humanos. Un niño no tiene que aprender a 'dominar' al perro, a 'estar por encima del perro' sino a respetarle."
Niños y perros: cómo evitar mordiscos y problemas
Estos tres churumbeles tienen a unas niñeras perrunas estupendas, pacientes y cariñosos perros.
Es importante recordar que para evitar sustos cuando hay niños y perros juntos la clave está en la supervisión: un adulto debe de estar presente, siempre, cuando un perro y un niño chico están interactuando. Siempre.
Crecer con un perro, según incontables estudios, mejora la autoestima y el desarrollo cognitivo de los niños, puede contribuir a mejorar sus habilidades verbales e incluso mejora su salud.
Elliot ha tenido compañía perruna desde que nació, una bella pit bull que no puede ser más buena o más cariñosa con su compañero humano.