Aslan, como tantos cientos de miles de personas, ha dejado atrás su país y su hogar, huyendo de la guerra de Siria. Su historia la ha captado y compartido ACNUR, la agencia de la ONU para los refugiados. Es, sin duda, una pequeña historia en ese inabarcable mar de tragedias pero Aslan ha logrado llegar a la isla de Lesbos y no ha llegado solo:este adolescente de 17 años se negó a emprender el complicado y sin duda aterrador viaje sin su perra, la pequeña Rose, una cachorrita Husky.
Por supuesto a Aslan le dijeron que no podía llevar a un perro con él, por supuesto. Pero este adolescente de 17 años no hizó caso y preparó su viaje a conciencia, pasaporte para Rose, agua y comida para ambos. De hecho, él sólo lleva una pequeña mochila a la espalda, para poder llevar el transportín de Rose.
Y ha logrado su propósito, a pie la pareja ha recorrido más de 500 kilómetros, según cuenta Aslan, hasta llegar a la isla griega de Lesbos.
La explicación de este chaval, entre sonrisas contagiosas, es sencilla. Quiero a mi perra, la necesito.
Aún tienen camino por recorrer, evidentemente, pero su tesón y su historia han tocado a mucha gente que quiere, de alguna manera, paliar el sufrimiento de las miles de personas que están llegando a Europa huyendo de la guerra.
En el facebook de ACNUR una mujer que se llama Rose Aslan, es decir que comparte el nombre tanto de la perra como del chico, ha expresado su deseo de ayudarle. No es la única, obviamente. Muchos se han mostrado dispuestos a acoger a Aslan y a su perra en sus casas de Austria, Hungría...
En la web de ACNUR nos explican cómo podemos colaborar y donar dinero para ayudar a los refugiados.
